Premios 20Blogs

viernes, 23 de octubre de 2009

Como decíamos ayer .............

Parece que fue ayer cuando escribí acerca del final de las competiciones por equipos nacionales y continentales y el principio de las mundiales en la categoría del motor. Parece que fue ayer y los mundiales de Fórmula 1 y motociclismo están a punto de terminar. En las cuatro ruedas se vivió un principio de temporada bastante convulso. La crisis. La desaparición de Honda y la irrupción de Brawn. La polémica de los disfusores que acabó en el mundial ya comenzado. La cosa es clara. Ross Brawn fue el más listo de la clase y arrolló en la primera mitad del Mundial. Él sabía que los demás coches iban a ir evolucionando a lo largo de la temporada por lo que todo lo que se consiguiera al principio era algo que no le podrían quitar. Y así fue. Jenson Button es campeón del mundo porque ganó 6 de las 7 primeras carreras. Luego se ha demostrado que a las grandes escuderías, la temporada las pilló con el paso cambiado. Ferrari no ha podido hacer nada más que resistir y esperar sumar algún punto. McLaren ha visot como Lewis Hamilton, apelando al orgullo del campeón, ha rozado la gloria. Si hubieran sido listo o si el Mundial hubiera durado tres carreras más, ........... Mala suerte la de Massa cuando era la cabeza de Ferrari y mala leche la que han tenido con Renault. Aunque claro, se puede ver desde otra perspectiva. ING dejaba el patricinio del equipo en plena época de crisis. Fernando Alonso se va. Pues igual toda la movida por lo de Singapur del año pasado lo ha movido Briattore para largarse de la F1. Todo es posible. Ya veremos la próxima temporada. nuevo reglamento, más equipos, uno de ellos español, que ya era hora, con pilotos españoles.
En motociclismo nos las prometíamos muy felices. Muchos pilotos y muy buenos en 125. Ya era hora de que Bautista fuera campeón del mundo de 250. Lorenzo y Pedrosa a destronar al pesado de Rossi. Pues bien, de todo eso, lo único que se ha cumplido es lo de la categoría pequeña. Julián Simón puso las cosas en su sitio desde el principio. Y aunque no ha tenido una temporada tan dominante como la que tuvo Álvaro Bautista, pero siempre ha estado ahí comentiendo pocos fallos. Lo malo era que, por detrás, había mucho niño con ganas de comerse el mundo. Y lo que se han comido es el asfalto dejándole el camino libre. Nico Terol, Marc Márquez, Pol Espargaró, Bradley Smith, .... han estado de traca. Pero siempre han tenido sus salidas, sus roturas, sus caídas. De todas maneras, hay una cosa que no cambia y es que el mejor equipo del mundial es el de Jorge Martínez Aspar. No se los años que lleva colocando en el podio final a dos pilotos como mínimo. Mientras, el hecho de que Simoncelli no empezara el mundial daba alas a los aspirantes. Y el número uno de todos era Álvaro Bautista. Lo malo es que se ha encontrado con un Héctor Barberá que parece que ha sentado la cabeza de una vez y, sobre todo, un Hiroshi Aoyama, que ha hecho recordar a Tetsuya Harada. Ha llegado sin hacer ruido, también se ha aprovechado de las malas decisiones de Bautista, de lo condescendientes que han estado los jueces con Simoncelli (de algo tiene que valer ser amigo de Rossi) y del desperta de Barberá. ¿Resultado? el japonés campeón del mundo en Valencia. Tiene que ser especial ganar el título en el último gran premio.
Y en MotoGP, los (extraños) problemas físicos de Stonner, la falta de acoplamiento de Pedrosa a su Honda y las fanfarronadas de Lorenzo (si, ya se que es como Rossi, pero éste, al menos, es español), le han dejado en bandeja el título a Rossi. Es la costumbre. Todo el mundo le lame el culo, él gana el título. Es la antítesis del tío deportivo. Si gente como Lorenzo, Melandri, Edwards, Capirossi, Elías y alguno más, se cayeran todos los días en la primera curva, este tontolapolla sería el payaso más feliz del mundo. A ver si ahora vuelve a coger un coche de rally y se estampa en la primera curva.

lunes, 5 de octubre de 2009

El regreso.

Hola de nuevo. No se cuanta gente podía estar esperando mi vuelta.Por si había alguno, ya estoy aquí. Las vacaciones, la desidia, falta de conexión, han sido factores que han hecho que no haya escrito desde hace tiempo. Y mira que ha habido cosas de las que hablar. Pero prometo firmemente volver a dedicarle un tiempo a escribir.