Premios 20Blogs

miércoles, 25 de febrero de 2015

De lo que sí y de lo que no.

Me hace mucha gracia algunos acontecimientos que se están produciendo alrededor de partidos de fútbol. Y no es que sea nuevo sino que ahora la gente (alguna gente) repara en ello. Me refiero a lo que la grada canta. La mayoría de lo que dice es para animar al equipo cantando el himno o canciones que alaban la entrega, el coraje y/o la historia, cánticos a jugadores, leyendas o entrenador, etc. Pero parte de esos cánticos siempre han sido contra el rival histórico y el que está en el campo en ese momento. Y no busca otra cosa que minar la moral del contrario.
Pero la gracia está en que lo que antes no era más que una coña, ahora es motivo de sanción. Dicho quede que, dentro de estos cánticos y estas mofas, están excluidos los que algunos béticos cantan a Rubén Castro. Me refiero a cosas como "ese portugués, que hijo puta es" o "Cristiano es un borracho" a Ronaldo, gordo al otro Ronaldo, enano o subnormal a Messi al que también se le llamaba borracho cuando empezó con lo de las vomitonas en el campo. Todo eso le molesta a alguien, sea o no el aludido, sea o no del equipo al que se refiere, y puede denunciar. Pero, digo yo. En Ipurúa, cuando estuvo jugando el Atlético de Madrid, se gritaba "españoles hijos de puta". Salió publicado en la prensa pero la televisión no dijo nada. Igual era porque se trataba del equipo rojiblanco que ya se sabe que, a pesar de ser el actual campeón de liga, no goza del beneplácito de muchos medios de comunicación. Meterme con un jugador o un equipo durante un partido contra el, es fútbol. Ni más ni menos. Insultarme por ser español en España no es fútbol. Es delito. Pero ya se sabe de donde es el presidente de la federación. 

miércoles, 18 de febrero de 2015

A Julián Ruiz.

No se sí es que no todo el mundo vale para columnista (o si, si no hace falta ser periodista) o pesa el nombre o los contactos de los que se disponga. 
En los tiempos en los que Los 40 Principales era un programa por etapas que iba de seis de la mañana hasta las ocho de la noche, al terminar había tres programas. Vuelo 605, de Ángel Álvarez, llamado así porque era piloto; el de Joaquín Luqui, que no recuerdo el nombre y Plásticos y Decibelios. Este programa lo presentaba Julián Ruiz. No lo solía oír por la hora a la que empezaba pero era interesante a pesar de la voz pastosa y el tono de superioridad que tenía. Cuando las emisoras FM de la Cadena SER pasaron a ser 40 Principales a todas horas, esos programas pasaron a M-80 y les perdí el oído. Quien esté leyendo ésto, se preguntará si me he equivocado de blog o es que se me ha ido la pinza. No. Explico. Julián Ruiz escribe una columna en El Mundo llamada El Cortador de césped y habla de deporte. Cuando compraba el periódico, la leía pero en la web, creo que no lo he hecho nunca. El caso es que ayer, a través de Facebook me llegó un comentario acerca de la columna que el señor Ruiz dedicó a la derrota atlética del pasado fin de semana. Como he comentado, no he leído ninguna columna suya desde que sigo el periódico uva web porque hay noticias más importantes pero su visión de mi equipo (si, soy del Atleti) es la del típico tío que sólo ve determinados partidos de su equipo (da la impresión de ser madridista) como los derbies o los clásicos, enterándose del resto de resultados por la prensa. Porque daba la impresión de haber visto el partido del Celta para ver si el antiguo equipo de Luis Enrique, ya que ahora ambas aficiones coinciden en luchar contra un enemigo común, sólo para ver si vengaban el orgullo herido. Y salió satisfecho ya que el equipo de El Cholo perdió. Eso si. Lo primero que hizo el entrenador fue decir que se había equivocado. Pero al bueno del cortador, eso merecía la pena ser obviado. Vivimos en un país libre donde cada uno tiene libertad para decir, escribir o pensar lo que quiera, si quiere. Pero para escribir en un medio de comunicación, que menos que saber (o por lo menos dar la impresión de que se sabe) de lo que se escribe. 
Saludos.