Este artículo empecé a escribirlo hace un mes. Exactamente. Y la verdad es que no sé de que trataba pero usaré el título para hablar del año que hemos tenido. Ha sido único en el sentido de la forma que ha afectado al deporte. Ha sido único. Y ha sido único por que cada disciplina se ha tratado de forma diferente. Y ha sido único el modo de ver como está gestionado el deporte en este mundo. Ya sea de nivel alto o bajo. Nivel en función de la prensa. Nada sabe nada de hípica pero se puede saber que pasa en la Bundesliga alemana o el Calcio italiano de fútbol. Ese nadie se refiere a gente como yo. A pesar de salir en muchas películas, asocio polo con un helado. Sólo se habla de hockey. artes marciales, voleibol, ... si hay éxitos internacionales o finales de nuestras ligas y/o Copas del Rey o la Reina. Deportes donde, el número y el nombre del/de la jugador/a está rodeado de logos de marcas que patrocinan a los equipos.
De hecho, la selección española de balonmano, los Hispanos, están de preparación para Eurocopa de balonmano. Es más importante lo nevado que esté el Santiago Bernabéu, el Metropolitano o el Alfonso Pérez (dos veces sacaron al primero aunque del Atleti salió también la Ciudad Deportiva) que esa preparación.
Ya sé que aquí el fútbol lo acapara todo, aunque el baloncesto suma, pero aunque no cuenten resultados, no estaría de más que hubieran hablado de los deportes que han arrancado en su momento y en los que se admite público.
Ya sé que el fútbol lo acapara todo pero, al menos, representa a algo que nos hace ver, al menos (otra vez), que hay algo más de que hablar que no sea el virus.
El único.
