Valencia

Siempre se ha dicho que lo malo de los nuevos ricos es que no saben reaccionar cuando las cosas, sin llegar a ir mal, no van tan bien como en los tiempos de bonanza. Nadie niega que el Valencia es un club de los que se conocen como históricos. Tiene su trayectoria, sus títulos y todo eso. Bajó a Segunda y subió la temporada siguiente. Tuvo su momento de gloria con las dos finales de Liga de Campeones consecutivas y se empezó a creer que ésto era Jauja. Se empezó a ver como un fracaso jugar la elimantoria previa de Champions o clasificarse para la UEFA. Pero se quiso hacer un modelo de juego del estilo Benítez. Se trajo a Quique Sánchez Flores y es el equipo siguió arriba pero sin dar ese salto de estar peleando por la Liga hasta el final. El juego del equipo presentaba dudas. Un estilista como Aimar se sentía perdido entre tanto corsé táctico. Pero en el fútbol actual priman los resultados. Eres bueno mientras los resultados acompañen. Sino, gente como Marcelino, por muy buena temporada que haga o por muy buena imgaen que de el equipo, acaba en la calle a las primeras de cambio. En el Valencia de hoy, la realidad es que el equipo está a dos puntos del descenso. Cuando se echó a Quique, el equipo estaba cuarto. ¿Y toda la culpa es de Koeman? Pues si. Y no. Lo malo de coger a una plantilla a mitad de temporada es que ya tiene una marca de identidad (hasta la falta de ella es una marca), impuesta por el anterior entrenador. Y tú te ves en la tesitura de lidiar con un grupo que, de entrada, está mal anímicamente, por mucho que hubieran hecho lo posible por echar al mister anterior, ya que estará más abajo de lo que pensaban. Y no es que a ellos les pueda importar eso mucho. Pero las primas se conceden por objetivos. Y si estás abajo no cobras, aunque éste no era el caso. Reconduce esa plantilla a la que no conoces. Tiens una forma de jugar que igual no cuadra con lo que hacía el anterior entrenador. Y, además, el presidente te da carta blanca para hacer una limpia. Poco después, comienza la debacle. El juego se vuelve malo. Los resultados no acompañan y llega el lío de los apartados. Creo que eso le ha ehcho un daño tremendo, tanto al club como instituación, como al equipo técnico, a la directiva y a la plantilla. Por no hablar de la masa social, que se ha vuelto contra todo y contra todos. Al final, el resultado esperado. Koeman a la calle. Per ose va con todo su equipo y con sus jefes. Es una forma de empezar de cero apra acabar la temprada de una forma digna e intentando recuperar el prestigio perdido. Suerte para Voro. Me gustaba como central. Bien colocado. Sin perder la posición. Grande en el Depor. A repetir ahora.